¿Notaste la aparición de ronchas rojas en una o varias partes del rostro? ¿Te pican mucho los ojos, la parte superior de los párpados o los lóbulos de las orejas ? Esto puede sugerir un “eczema facial”. Empecemos explicando lo básico.
¿Qué es el eczema facial?
El eczema es una afección cutánea que puede afectar tanto a niños como a adultos. En concreto, se trata de una reacción inflamatoria: la piel reacciona de forma exagerada a su entorno, está muy seca y se cubre de ronchas rojas, vesículas, a veces supurantes, y, sobre todo, desencadena un deseo incontrolable de rascarse hasta el punto de crear sensaciones de quemazón o incluso hinchazón local, ya que la piel pica mucho.
Esta afección, aunque no es contagiosa y no tiene consecuencias graves que pongan en peligro la vida, puede ser muy difícil de sobrellevar, sobre todo debido a lo siguiente:
- Es visible.
- Esto genera ansiedad y estrés.
- Y luego, debido a la comezón, puede llegar a ser dolorosa y, en algunos casos, también puede perturbar el sueño.
Una consulta con tu profesional médico es esencial para aclarar qué puede haber provocado la aparición de este eczema, y en función de la causa, te sugerirá los tratamientos más adecuados con un seguimiento regular.
Mientras tanto, podemos darte algunos consejos. Si sospechas que padeces un eczema facial, suele tratarse de un eczema facial alérgico o por contacto, o bien de un eczema atópico facial. Te lo explicamos.